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Hacer el amor, es una deliciosa demencia voluntaria, a la que se
entregan unicornios, pegasos y dragones (es decir enamorados puros,
solitarios fugitivos y adúlteros asustados) entre otros, por la cual se
realizan expediciones larguísimas a los continentes desconocidos que
todos tenemos sobre la piel y debajo de ella.
Después de la vigorosa actividad física, algo nos tiene que venir a la mente, ¿cierto?
El pensamiento puede variar dependiendo de las veces y las personas con las que hace el amor.
1. Eso estuvo bien.
2. !Lo haría así su ex novia!
3. !Le gustaría!
4. Tan pronto que terminó.
5. Lo a tenido pequeño.
6. Ojalá no quede embarazada
7. ¿Sería de muy mal gusto checar mi celular ahorita? ¿Cómo 20 segundos después de hacer el amor? Sí.
8. Mejor voy a orinar para que no se me dé una infección urinaria. Y decírselo por cuarta vez.
9. Dios, estoy respirando como una anciana de 70 años que fuma como chimenea. Necesito correr más seguido. Tengo ese chaleco cute de J.Crew y todo.
10. ¿Mi gato estuvo viéndonos todo el tiempo? Probablemente. Por lo menos no intentó rasguñarle allá abajo.
11. ¿Cómo termina el preservativo siempre en el piso?
12. ¡Desde la última vez me hizo caso sobre el asunto de los dedos! Es bueno saber que puede tomar sugerencias.
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